Francia tiene una extraordinaria gama de diferentes geografías y climas que favorecen la producción local de todos los tipos de ingredientes, esta variedad es el apoyo de la pasión francesa por la buena comida en todas sus formas, siendo uno de los factores más importantes de la cultura de la nación gala y del mundo siendo considerada como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.
Las comidas van desde las muy básicas, como la baguette tradicional con algún queso de producción nacional acompañado de un vino común, hasta otras comidas muy elaboradas, que para poder realizarlas en la casa habría que hacer una docena de cursos y diferentes vinos consumidos durante varias horas, siendo esta última una de las más populares dentro de los restaurantes franceses que se ofrecen en el mundo.
Casi todos los platos franceses famosos son especialidades de alguna región específica, algunos de los cuales han trascendido su condición regional y se han hechos famosos en todo el país y en el mundo, tales como el Coq au Vin y Foie Gras, mientras que otros es mejor disfrutarlos en su lugar de origen ya que dentro de otras ventajas siempre se consiguen ingredientes frescos por lo que los platos realmente mucho mejor que en cualquier lugar del mundo.
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