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Una de las ciudades de playa de Francia más encantadoras y pintorescas es San Juan de la Luz, la cual es una tranquila comunidad costera vasca, ubicada en el suroeste de Francia, cerca de la frontera española, justo en lo que podría llamarse como el corazón del País Vasco teniendo una privilegiada salida al mar que está protegida por una linda bahía que hace que las aguas sean tranquilas y agradables para bañarse en ellas.

San Juan de la Luz cuenta con una hermosa playa, de arena fina, así como también una gran zona comercial peatonal, sus casas están marcadas con una preponderancia en la arquitectura vasca, también en las plazas encantadoras de la ciudad y las condiciones para el surf impresionante.

En la ciudad también se encuentra un pequeño puerto pesquero, del cual provienen toda la provisión de sardinas, anchoas y el atún de toda la región,  por lo que si visita esta ciudad no se puede perder comer en algunos de los restaurantes especializados en la gastronomía con estos ingredientes.

Uno de los atractivos de la ciudad es la iglesia de Saint-Jean-Baptiste la cual es una de las facjadas más sencillas de Francia, pero en su interior se esconde un esplendido altar barroco, donde Luis XIV y María Teresa de España se casaron en 1660.

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La ciudad se Saumur es una de las más impresionante obras de la arquitectura renacentista característica del Valle del Loira, siendo el monumento más destacado el castillo con el que comparte el nombre, una de las vistas más maravillosas es cuando a la noche iluminan esta fortaleza y se puede apreciar desde el río toda la ciudad protegida por fantasmas de otras épocas que parecen asomarse desde el castillo.

Saumur está en el departamento de Maine-et-Loire conocido históricamente como Anjou, el castillo de Saumur fue construido originalmente como una fortaleza, pero  fue destruido en 1067, para ser reconstruida un siglo más tarde en gran parte en la forma que lo vemos hoy.

El castillo cambió de manos varias veces durante los siglos que siguieron, a raíz de las transiciones frecuentes de la región entre ingleses y franceses,  en 1589 el protestante Enrique IV (de Francia y Navarra) dio el castillo como regalo a Duplessis-Mornay.

En la actualidad en el castillo hay varios museos, incluyendo el Museo de Artes Decorativas, el Museo del Caballo y un Museo del Juguete, pero lo interesante del recorrido está lejos de ser las exposiciones sino la posibilidad de caminar por los pasillos históricos que tiene esta fortaleza.

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Las estaciones varían en Francia, pero muchos visitantes encuentran que la primavera y el otoño ofrecen climas agradables y menos aglomeraciones turísticas.

La mejor época para visitar Francia puede depender de tus preferencias personales y de las actividades que desees realizar. Aquí hay algunas consideraciones para diferentes estaciones:

1. Primavera (marzo a mayo):
   • La primavera es una época encantadora para visitar Francia. El clima es suave, con temperaturas agradables y flores en plena floración. Las multitudes suelen ser más pequeñas en comparación con el verano, lo que facilita la exploración de lugares turísticos.
2. Verano (junio a agosto):
   • El verano es la temporada alta en Francia. El clima es cálido y es ideal para actividades al aire libre. Sin embargo, las atracciones turísticas pueden estar más concurridas, especialmente en destinos populares como París y la Costa Azul.
3. Otoño (septiembre a noviembre):
   • El otoño es otra temporada agradable para visitar. Las temperaturas son moderadas, y los colores otoñales embellecen paisajes como los viñedos y los castillos del Valle del Loira. Las multitudes tienden a disminuir después del verano.
4. Invierno (diciembre a febrero):
   • El invierno en Francia puede ser frío, especialmente en el norte y en las regiones de montaña. Sin embargo, es una excelente época para disfrutar de mercados navideños, estaciones de esquí en los Alpes y actividades invernales. Las ciudades también tienen una atmósfera festiva durante las vacaciones.

En resumen, la primavera y el otoño son estaciones populares para visitar Francia debido a las condiciones climáticas agradables y a las multitudes más pequeñas. Sin embargo, la elección de la mejor época dependerá de tus preferencias personales y de las actividades específicas que tengas en mente.

En todas las calles de  Paris, sobre todo en las que se encuentran más de los lugares turísticos, podemos ver la presencia de todo tipo de artistas callejeros que subsisten con este tipo de actividad, en donde la actividad preponderante es la venta de artesanías, o de la comercialización de cuadros y retratos realizados por ellos mismos, así como también la presentación de espectáculos de malabares o danza, o en muchas veces de canto también.

En Paris se pueden espectáculos de toda índole tales como la de teatro callejero, música y baile de Francia, los cuales viven en muchos casos de la caridad de los turistas y en otros de la venta de los productos que comercializan.

Lugares como Montmartre, cerca del Sagrado Corazón, y el Barrio Latino suelen ser populares entre los artistas callejeros debido a la afluencia de turistas.

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