El Pont Neuf (Puente Nuevo) lo hallaremos en la hermosa ciudad de París, con más exactitud en la Isla de la Ciudad, a la cual éste cruza de un lado al otro, pudiéndose contemplar desde allí una magnífica vista del Río Sena.
Este magnífico puente es, a pesar de su nombre, el más antiguo de París y el primero en ser construido en piedra para cruzar el Sena. Por esta razón se le ha otorgado el título de “monumento histórico”.
El hecho de haberse levantado en el sitio donde se encuentra fue debido a la necesidad de tener un paso para cruzar a la Ile de la Cité de París. Al construirse el puente se dejaron de lado otros dos de madera que eran muy inestables.
El Pont Neuf comenzó a ser construido en 1578, por orden de Enrique III y Catalina de Médicis fue la encargada de colocar la primera piedra de la obra. La construcción culminó recién en 1607 debido a varias guerras civiles que existieron en esa época y que no permitían la continuación de las obras.
De ahí viene su nombre de Puente Nuevo ya que en esa época fue su inauguración formal siendo el único en su tipo.
Esta hermosa construcción posee 232 metros de longitud y tiene cinco arcos que se alternan con gruesas columnas, todas ellas adornadas con máscaras de estilo grotesco.
A lo largo de su extensa historia ha sido testigo y también protagonista de diversos acontecimientos de algunos artistas como por ejemplo en 1994 un diseñador lo cubrió de flores en su totalidad.
El puente puede ser visitado ya sea cruzándolo a pie, lo que además proporciona una hermosa vista del lugar, o pasando por debajo de él en uno de las típicas embarcacones que navegan el Sena.
El Pont Neuf, es sin duda uno de los puentes más bonitos de Europa y es además, todo un símbolo de esta hermosa ciudad.
Foto:Fuente Autor Neto